EN LAS PUERTAS DE LA NANOINDUSTRIA

by / Comentarios desactivados en EN LAS PUERTAS DE LA NANOINDUSTRIA / 12 View / 30 abril, 2015

Bell Export S.A. es productora de adsorbentes moleculares para la fabricación del medicamento gas-oxígeno conforme a la Farmacopea Nacional Argentina. Ante este escenario, la Nanotecnología deja de ser un interrogante para convertirse en una realidad instalada en la Argentina a escala industrial. A continuación, se presenta la opinión del Ing. Ricardo De Simo-ne, Presidente de la empresa mencionada.

 

Ing. De Simone: su empresa es un ejemplo de ensayos y desarrollos a partir de un trabajo sostenido en conjunto con la ciencia, ¿qué puede comentar sobre esta experiencia?

R.D.S.: Llevo treinta y cuatro años con la ingeniería y mis comienzos se forjaron en la Comisión Nacional de Energía Atómica -CNEA- con una beca de la Comisión de Investigaciones Científicas Provincia de Buenos Aires -CIC- de la mano de dos Directores profesionales, el Ing. Alfredo Martín Hey y el Dr. Carlos Andreone. Allí, se genera la “impronta” que habilita a incluir al conocimiento, a la búsqueda sostenida del “cómo” que no se abandona y se incrementa cualitativamente en el transcurso del tiempo. De modo que un trabajo mancomunado con la ciencia y la tecnología es actualmente, parte de nuestro “quehacer” cotidiano.

 

Mis inicios en la investigación y en el desarrollo en el campo nanotecnológico fue producto de una propuesta informal del Dr. Ortiz en el marco de un encuentro organizado por la Fundación Argentina de Nanotecnología que se realizó en el Palacio San Miguel en la Ciudad de Buenos Aires. Luego, obtuvimos la propuesta del Dr. Carlos Rinaldi en una reunión de ABEST que finalmente, concretamos exitosamente con el Dr. Alberto Lamagna en el marco de un PID junto al Ministerio de Ciencia, Tecnica Innovación Productiva de la Nación.

 

¿Podría explicar cómo se realiza el pasaje de las moléculas de O2 y de N2 hacia escalas nanométricas para la producción del medicamento gas oxígeno?

R.D.S.: No hay tal pasaje. Existe en la naturaleza una mezcla de gases que componen el Aire, el mismo que respiramos constantemente y que nuestro organismo se encarga de captar al oxígeno para enviarlo al torrente

sanguíneo y vivir. Es nuestra materia prima en el proceso de adsorción molecular. El Aire está conformado por gas nitrógeno, oxígeno, argón y otros gases en porciones despreciables para nuestro proceso. El mecanismo utilizado para identificar y separar esas moléculas es la adsorción y el tamaño involucrado es para el O2: 3,43Å = 0,343 nm y para el N2, de 3,68Å = 0,368 nm. Esta diferencia en escala nanométrica es perfectamente diferenciada por los tamices, (zeolitas, carbones moleculares, etc. “artificiales”) que proceden a separa unas de otras en un ciclo de presiones y despresurizaciones escalonadas en tiempos predefinidos que con “compuertas” que se abren y cierran estratégicamente, se consigue albergar en contenedores diferentes produciendo a escala macro, volúmenes de gas oxígeno o nitrógeno u otro en un proceso continuo.

 

 

Desde el punto de vista técnico ¿cuáles son los aportes y beneficios que los procesos nanotecnológicos aplican en un producto industrial?

R.D.S.: Infinitos y, no me considero capaz de poder enumerarlos. En nuestro caso, en este fenómeno físico químico de la adsorción molecular, se consigue producir un medicamento bajo estrictas normas de procedimiento en proceso y calidad de producto que evita costosos y peligrosos transportes de gases en estado líquido a temperaturas del orden de los (menos) -200° centígrados- que deben ser almacenados también en estado líquido con una ineficiencia económica fenomenal.

 

Además, en los rincones del territorio más alejados de los centros de producción, por ejemplo, en un poblado en la montaña ubicado a cuatro mil metros de altura, se puede instalar una Planta PSA de adsorción molecular construida con el fin de que genere y suministre el medicamento gas oxígeno in situ, para que los médicos y paramédicos nunca estén carentes del medicamento en cualquier circunstancia que el paciente lo requiera.

 

¿Considera que el trabajo realizado hasta el presente es un antes y un después en lo que hace a la competitividad de su empresa en el mercado?

R.D.S.: Aunque siempre quedan asignaturas pendientes a lo largo de este camino que transitamos, construimos, progresamos…, el avance que nos dio haber desarrollado, en Bell Ville -Córdoba- la tecnología a escala macro bajo las Normas del ANMAT produjo no sólo un cambio en nuestra empresa, sino, además, un cambio de paradigma en el mercado argentino. Hoy, los precios se encuentran en un tercio de los valores históricos y la oferta del medicamento oxígeno desde dos tecnologías diferentes que, finalmente, terminan operando como factores de una verdadera competencia. Se ha roto “el cartel”. Esto es la concreción de aquella medida política universal impulsada y aplicada por el Dr. Ginés González García cuando ocupó el Ministerio de Salud de la Nación. Hoy, el gas oxígeno medicamento está en el mercado como un genérico, bajo la normas de la autoridad de aplicación ANMAT en el marco de la Disposición 4373 y conforme a la Farmacopea Nacional Argentina.

 

¿Cómo podría articularse el concepto de I+D con el de Responsabilidad Social Empresaria o bien común teniendo en cuenta que su producto es utilizado para la salud de la población?

 

R.D.S.: Pues bien, anteriormente se dijo algo. Estamos en condiciones de poder atender a toda la población incluso, a aquellos pueblos ubicados en alguna región inhóspita del territorio que necesiten medicamento indispensable para su sistema de salud y a precios más económicos; en este sentido, el impacto colectivo que hemos logrado, es netamente satisfactorio. También esto impacta positivamente tanto en el medio ambiente como en el mercado industrial. Porque, si puedo “quemar” cualquier combustible sólido, líquido o gaseoso con el comburente por ejemplo, gas oxígeno del 95% de concentración, sin presencia de nitrógeno, evito en

la combustión la formación de los nitruros de todos los Nx y de esta manera, logro una mejor y mayor eficiencia en kilocalorías producidas por unidad de combustible involucrado, entre otras cosas, por la ausencia del nitrógeno y de esos otros gases.

 

Desde una postura empresaria, ¿cómo calificaría la posición de la Argentina en lo que respecta a los temas nanoindustriales?

R.D.S.: Aunque no cuento con ese dato, entiendo que el Ministerio de Ciencia y Tecnología e I.P. trabaja en la recopilación de esa información como tarea de la Fundación Argentina de Nanotecnología.

En otras palabras, y en forma general, repitiendo palabras del Dr. Conrado Varotto, en la Argentina sigue habiendo una calidad de jóvenes que es indiscutible y sorprendente; en ellos, radica la esperanza y este hecho

le ofrece a la Argentina una posición esperanzada de acercarse a posiciones destacadas para beneficio del colectivo social.

 

 

Aunque haya comprobado resultados, ¿cuáles son sus expectativas sobre posibles avances en nanotecnología para un futuro próximo?

R.D.S.: Seguir trabajando en el marco de lo que nosotros llamamos INVABIO, que incluye todos los temas que van de la “mano” de los gases producidos in situ; con una economía razonable y además, seguir conectados con la biotecnología que impacta favorablemente para la elaboración de los alimentos, para la producción limpia de energía y por supuesto para aplicaciones concretas en la salud humana, animal y vegetal.